Todos, todos quieren el resultado. Todos quieren el pedestal. Todos quieren la gloria. Todos quieren el éxito. Todos quieren la prosperidad. Todos quieren el triunfo. Todos quieren llegar a la cima, todos deseamos tener, obviamente una multitud de audiencia, de repente de seguidores… Todos deseamos sentirnos como que: “¡Hey! Logré la victoria, logré el éxito, logré todo lo que me propuse”. Todos queremos que, hasta cierto punto, haya un nivel de admiración, de respeto. Todos queremos la gloria, pero nadie quiere el proceso. Nadie. La gente que quiere bajar de peso, quiere la gloria pero no quiere el proceso de hacer ejercicio, de comer de la manera correcta. ¿Cierto o cierto? 

Todos los que quieren hacerse millonarios, multimillonarios, billonarios, todos queremos el resultado. Queremos los billones en la cuenta de banco, los millones. Todos queremos, y cuando digo todos, me refiero o sea, todas las personas que están buscando aquello. Mira a lo mejor no quieras tú la parte económica, pero hay algo que si quieres. Hay algo que si deseas, que sí anhelas. Y dentro de ese aspecto, todos queremos la gloria, pero no queremos ese proceso. 

Y déjame te explico lo único que te puedo decir es esto. Muchos obviamente me han llegado a hacer comentarios como por ejemplo, donde me dicen: “Raúl es que usted todo lo que toca lo convierte en oro”, o sea: “Como que todo lo que usted hace le va le va bien”. Y la gente dice: “¿Cómo le hace o cómo pudiera yo tener el resultado que usted tiene, o que usted está viviendo, pero de una manera simple”. Me hacen preguntas como: “Dígame el secreto verdadero, pero el secreto verdadero”. Cómo que si con una sola palabra puedo definir todo el secreto, ¿no?

Entonces la realidad es esto: Hay un proceso. Y tenemos que ser conscientes que, así sea camino a la riqueza, camino a la libertad financiera existe un proceso. Mira tú muéstrame dónde quieres ir y donde tú quieras ir existe un proceso, ¿okey? Entonces lo más interesante es que todos queremos la gloria, pero no obviamente la jornada. 

Y lo más interesante es lo siguiente: La gente que me conoce: “Es que Raúl tú haz logrado esto, y es que te ha ido bien en esto, y es que has tenido la oportunidad de viajar por el mundo, de tener propiedades de riqueza por todos lados”, y las realidad es lo siguiente: Tienes negocios múltiples… Te ha ido muy bien. Lo que la mayoría de la gente no alcanza a ver, es que ese proceso, todos queremos la gloria y todos pensamos que estaríamos dispuesto a pagar el precio, pero imagínate cuando te toca vivir, por ejemplo: Te toca vivir en momentos, situaciones donde te dejan las cuentas bancarias vacías. 

La pregunta, ¿seguirías en el proceso? ¿Estarías dispuesto a pasar por algo así? Dónde te dejan sin dinero en la cuenta de banco, en dónde te roben las personas con las que tú le estás confiando. En donde tomen ventaja absoluta, en donde hablen mal de ti. En donde critiquen, en dónde te demanden. En dónde literalmente comiencen a voltearse y te den la espalda. ¿Estarías dispuesto a pasar o vivir por ese proceso? 

Porque a los empresarios, o a los emprendedores les toca vivir. Si vas a construir equipo, les toca vivir esos procesos. A los que te quedan mal, a los que no te pagan. A los que eventualmente te echan a perder las cosas. Porque eso es parte de lo que me ha tocado a mí en lo personal vivir. A mi me han engañado, me han robado, me han demandado, me han traicionado, me han dejado sin dinero en la cuenta de banco, me han mentido, me han criticado, me han amenazado, o sea lo que ni siquiera tú te imaginas. 

¿Pero sabes qué? La gloria… El sabor de la gloria sigue valiendo la pena, no para todos. Por eso creo que no todos tienen el cuero, no todos tienen el cuero para poder emprender o desarrollarse como empresarios, empresarias. Ahora, ojo estoy hablando de dos puntos distintos. 

Al ser inversionista, puedes ser un inversionista a solas. Para ser empresario, o empresaria va a requerir de que hagas un equipo. Y literalmente si quieres llegar a la gloria, vas a pasar por ciertos procesos. Desde que personas con las que trabajan directamente contigo como empleados, si tienes empleados, te van a hacer cosas. 

O personas con las que no se consideran empleados, pero son personas con que tú contratas de manera independiente. Lo mismo. Entonces nada más quiero que tú entiendas esto asegúrate de amar el proceso. Porque si no lo amas, entonces vas a caminar un camino muy frustrante. Si queremos la queremos la gloria, necesitamos amar el proceso y si estamos dispuestos a vivir el proceso y ser persistentes y nunca rendirnos… Entonces vamos a merecer la gloria y de esa manera te vas a dar cuenta que vale más que la pena.